La enfermedad ha obligado al laguino a permanecer, todo este tiempo al interior de su domicilio ubicado en pasaje Los Almendros 161, de Población 11 de Septiembre, debido a que el daño sería progresivo.
Según el mismo Toledo, sus vecinos le prestan colaboración con la alimentación y los quehaceres del hogar.
“Son ellos, mis vecinos, los que se preocupan de mantener un ritmo de vida normal, lidiando con mi enfermedad”, expresó con dificultad el escritor.
Afirmó que producto de este mal, a sus 66 años ya no puede escribir, debido a que la enfermedad se lo impide, sin embargo puede leer, sin mayores complicaciones.
Cabe consignar que a pesar de todo, a don Avelio no le faltan las visitas, lo que le mantiene en buen estado anímico, pero como todo persona que vive sola y enferma requiere de ciertos cuidados, los que, pese a la buena voluntada de sus vecinos, no son suficientes.
En una visita hecha por este medio se pudo constatar la falta de un televisor que le permita distraerse, ya que el que tiene presenta fallas técnicas, debido a la falta de recursos, por las que atraviesa.
los lagos online
Miércoles 25 Octubre 2006
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